
Después de arrestar a Ana Julia, se le trasladó a dependencias de la comandancia de la Guardia Civil de Almería y se ha pedido que no se difunda ningún tipo de bulo respecto al caso. Delante d ela comandancia se han concentrado centenares de personas pidiendo justicia para el pequeño Gabriel.
Un vecino de Ana Julio captó el momento de su detención, ante un amplio despliegue policial donde se la escuchaba gritar que no ha sido ella. Tras la confirmación de que el cuerpo del pequeño se encontraba en el maletero la mujer se derrumbó y confesó que había sido ella.
La camiseta hallada por la detenida
La única pista que había sobre el caso de Gabriel era la camiseta que se encontró junto a la depuradora el pasado fin de semana. Casualmente la camiseta fue hallada por la detenida e identificada por el padre del niño. Posteriormente se confirmó que pertenecía a Gabriel.Este hecho puso la atención por parte de los investigadores en Ana Julia, convirtiéndola en la sospechosa principal, aunque ya antes estaba siendo vigilada por sus contradicciones y por protagonizar dos momentos clave en el caso. Ana Julia fue quien vistió al niño el día que desapareció y fue quien encontró la camiseta a tres kilómetros del lugar de la desaparición en una zona que ya había sido registrada por los agentes. También algo sospechoso fue que la camiseta estaba seca a pesar de los tres días de intensas lluvias, pero no se le detuvo por la posibilidad de hallar con vida al niño.
El pequeño desapareció el pasado 27 de febrero cuando salió a las 15.30 horas de casa de su abuela paterna en la pedanía de Las Hortichuelas. Desde entonces han pasado dos semanas de búsqueda en la que han participado más de 2.600 voluntarios y casi 1.500 profesionales.
El desenlace de esta historia ha conmocionado a los vecinos de la pedanía de Las Hortichuelas y a toda España. Nadie pensó que Ana Julia pudiera ser la responsable de los hechos.